En el número 7 de la calle Grenelle, un inmueble burgués de París, nada es lo que parece. Dos de sus habitantes esconden un secreto. Renée, la portera, lleva mucho tiempo fingiendo ser una mujer común. Paloma tiene doce años y oculta una inteligencia extraordinaria. Ambas llevan una vida solitaria, mientras se esfuerzan por sobrevivir y vencer la desesperanza. La llegada de un hombre misterioso al edificio propiciará el encuentro de estas dos almas gemelas.
Juntas, Renée y Paloma descubrirán la belleza de las pequeñas cosas. Invocarán la magia de los placeres efímeros e inventarán un mundo mejor.
«Cuánto mejor sería si compartiéramos unos con otros nuestra inseguridad, si todos juntos nos adentráramos en nosotros mismos para decirnos que las judías verdes y la vitamina C, si bien alimentan al animal que somos, no salvan la vida ni sustentan el alma»
«La elegancia del erizo» es un pequeño tesoro que de forma muy sencilla y bonita profundiza en el sentido de la vida, la búsqueda de la perpetua felicidad y el deseo húmano. La autora, con su gran habilidad para la escritura, mezcla momentos de humor, filosóficos y tristes. La ambientación es perfecta como contexto de la obra y sus personajes, redondos, son personas completas y complejas, con historias realistas y atractivas.
Me encantó esta obra que llegó a mis manos por casualidad, empecé la lectura con muchas reservas por la premisa de la sinopsis pero a medida que la lectura continuaba, me sentía más y más atraída y enganchada, reposando la lectura y reflexionando sobre aquello que lo que el libro y los personajes profundizaban.
Es una lectura que realice hace muchos años pero que repito cada poco.